martes, 24 de marzo de 2009

21ª División Panzer

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Mayo de 1941 - Abril de 1945

A mi parecer una buena División Blindada alemana durante la Segunda Guerra Mundial, me hubiese gustado servir en ella como artillero principal o ametrallador de un tanque. En este pequeño tema únicamente nos centraremos en el teatro de operaciones Norte Africano.
Como apoyo a los ejércitos italianos en situación de derrota en Libia, el 11 de enero de 1941 Adolf Hitler ordenó a la Wehrmacht el envío de un Speerverband (literalmente: destacamento de bloqueo) formado a partir de unidades procedentes de la 3ª División Panzer. Esta agrupación tomó el nombre de 5. Leichte division y su mando se confió al general Streich. El 5 de febrero, Hitler decidió el envío de una segunda división y, al día siguiente, encargó a Erwin Rommel que asumiese el mando de ambas unidades, así como de las fuerzas mecanizadas del Regio Esercito italiano. Rommel llegó a Trípoli el 12 de febrero, seguido dos días más tarde por la vanguardia de la 5. Leichte division, es decir, la Aufklarung abteilung 3 y el Panzerjaëger abteilung (mot.) 605. Estas débiles unidades oraganizaron algunos golpes de mano para impresionar a los británicos, que en cualquier caso habían recibido la orden de suspender su avance. El 11 de marzo desembarcó el Panzer regiment 5, con 150 tanques de los que 80 eran PzKW III y PzKW IV. El 31 de marzo Rommel desencadenó un contraataque, atajando por el desierto, y expulsó a los británicos hasta la frontera egipcia, cercando a la guarnición australiana de Tobruk, el 11 de abril. No obstante, los asaltos contra el puerto fracasaron ante la determinación demostrada por la 9ª División australiana, que logró incluso aniquilar a uno de los dos batallones de ametralladoras de la 5. Leichte division, el Maschinengewehr Btl. 8, durante un contraataque el 13 de abril. De este modo la situación quedó bloqueada y Rommel se vio obligado a esperar refuerzos, así como una mejora de sus suministros, para reemprender su avance hacia Egipto.



Avance de la 39º sección Panzerjäger perteneciente a la 21ª División Panzer en 1942


Tras la llegada de la 15ª División Panzer al teatro de operaciones del Norte de África, el 1 de agosto de 1941, la 5ª División ligera se reestructuró, tomando el nombre de 21ª División Panzer.
Formaba parte entonces del Afrikakorps, al mando del Generalfeldmarschall Erwin Rommel. La División sirvió durante la campaña de África, inicialmente especialmente contra unidades británicas, pero más tarde contra diversas unidades aliadas.
Cuando los británicos lanzaron su Operación Crusader, la 21° lucho bien pero fue obligada a retroceder por el 8vo. Ejercito Británico a las posiciones cerca de Gazala en África del Norte. Cuando los británicos continuaron presionando se vio obligada a luchar continuas acciones de retaguardia y gracias a el valor del 5o Regimiento de la 21° División, la retirada a El Aghelia fue exitosa.
En Enero de 1942, despues de que fue plenamente reabastecido el DAK ( Dessert Afrika Korps ), lanzo su ofensiva contra los Britanicos. En el termino de dos semanas, el DAK recupero Benghazi y se movio cerca de 350 millas hacia la frontera con Egipto. La ofensiva fue detenida cuando los alemanes alcanzaron la posicion de Gazala, esta se encontraba fuertemente minada hasta Bir Hacheim; nuevamente en Mayo de 1942 la 21 participo en un nuevo esfuerzo lanzado por Rommell, con el cual finalmente tomo Tobruk, deteniendo al final en Alma Halfa.
Durante la segunda Batalla de El Alamein, las batallas de Gazala y Bir Hakeim (en esta última combatió contra republicanos españoles ex combatientes del Ejército Popular Republicano y alistados en el ejército de la Francia Libre) y durante su retirada hacia Túnez, en 1942, la División sufrió graves pérdidas. Estaba en la vanguardia del contraataque durante la batalla del paso de Kasserine, pero resultó destruida, como la mayor parte de las unidades alemanas, cerca de Túnez, en 1943.

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PzKpfw III de la 21 Panzer avanzando a lo largo de la costa en Cyrenaica, Marzo de 1941.

Composición de la 5. Leichte division en abril de 1941
• Panzer regiment 5, con 2 abteilung cada uno de 3 compañías ligeras y una pesada.
• Aufklarung abteilung 3, con dos compañías de autoametralladoras y dos de motociclistas
• Infanterie regiment z.b.V. 200, con dos batallones, los 2º y 8º Maschinengewehr bataillon.
• Panzerjaëger abteilung 39 con 9 cañones de 88 mm
• Panzerjaëger abteilung 605 equipado con Panzerjaëger I
• Flak abteilung 1/33
• Flak abteilung 606

Jefes


20 de mayo de 1941: Generalleutnant Johann von Ravenstein
1 de agosto de 1941: Generalleutnant Karl Böttcher
29 de noviembre de 1941: Oberstleutnant Gustav-Georg Knabe
1 de diciembre de 1941: Generalleutnant Karl Böttcher
11 de febrero de 1942: Generalleutnant Georg von Bismarck
21 de julio de 1942: Oberst Alfred Bruer
agosto de 1942: Generalleutnant Georg von Bismarck
1 de septiembre de 1942: Generalleutnant Carl-Hans Lungershausen
18 de septiembre de 1942: Generalleutnant Heinz von Randow
1 de enero de 1943: Generalleutnant Hans-Georg Hildebrandt
15 de marzo de 1943: Generalmajor Heinrich-Hermann von Hülsen
15 de mayo de 1943: Generalleutnant Edgar Feuchtinger
15 de enero de 1944: Generalmajor Oswin Grolig
8 de marzo de 1944: Generalleutnant Franz Westhoven
8 de mayo de 1944: Generalleutnant Edgar Feuchtinger
25 de enero de 1945: Oberst Helmut Zollenkopf
12 de febrero de 1945: Generalleutnant Werner Marcks


Fuentes:
http://es.wikipedia.org/wiki/21%C2%AA_Divisi%C3%B3n_Panzer
http://en.wikipedia.org/wiki/21st_Panzer_Division_(Germany)
http://panzertrup.www.50megs.com/21.html
http://www.forosegundaguerra.com/viewtopic.php?t=1893

lunes, 23 de marzo de 2009

Descargas

Hola mis estimados amigos, he decidido convertir mis aportes en *.pdf para los que guste descargarlo (solo haz clic en su nombre)

Sherman
T-34
Matilda
Muralla del Atlantico



los saludo

miércoles, 18 de marzo de 2009

Laminas del Panther



PzKpfw V Panther Ausf. D, Brigada Panther SS; Kursk, Unión Soviética, julio de 1943.
Este carro tiene el acabado amarillo liso de fábrica ordenado para todos los vehículos acorazados alemanes desde febrero de 1943; la pintura verde oscura y marrón del mimetizado se diluía a partir de concentrados de pasta y se aplicaba a nivel de unidad, en este caso con un suave rociado moteado. Obsérvese que cubre los trozos de oruga adicionales sujetos a los lados del casco y de la torre. Curiosamente, el número de carro de mando de la 2ª Cía. de la brigada, esta pintado con silueteado blanco en los trozos de oruga y no en la pared de la torre. No son visibles otros distintivos en las fotografías de estos vehículos. Los tripulantes visten monos miméticos moteados en una sola pieza de las Waffen-SS.





PzKpfw V Panther Ausf. A, unidad desconocida; Unión Soviética, invierno de 1943-44.

El uso que hacen los tripulantes de este vehiculo del anorak gris de campaña de tres cuartos con capucha y sobre pantalón indica que pertenecía a una unidad de las Waffen-SS; dicha ropa era reglamentaria en las Waffen-SS, pero normalmente no la vestía el personal del Ejercito. En el carro, el acabado amarillo de fabrica esta casi totalmente recubierto por un encalado mimético de invierno, quedando sin cubrir la suspensión, el cañón y la horquilla del mismo. Se deja al descubierto un rectángulo amarillo como fondo para el número de la torre, 511 (1er carro, 1ra sección, 5ta compañía).




Carro de mando PzKpfw V Panther Ausf. A, Regimiento Panzer Grossdeutschland; sur de Ucrania, enero de 1944.
Este carro era del comandante del regimiento, Oberst Willi Langkeit, a quien se ve en la torre; en la foto que fue sacada esta ilustración el oficial que esta de pie en primer plano, a la izquierda, el Oberst Kart Lorenz, ha sido incorrectamente identificado como su comandante. El acabado amarillo de fábrica esta totalmente recubierto por recalado de invierno. El emblema descolorido de la cruz nacional esta pintado en las esquinas delanteras de los laterales del casco, en su posición habitual en los Panther. El distintivo de la torre es interesante: un pequeño emblema divisionario negro –el Stahlhelm de la división GD- y un cero en color negro. Otra foto de este Panther de Langkeit tomada unas semanas mas tarde muestra un mimetizado en tres colores y el número 01 (adjunto inferior). Obsérvese la pasta antimagnética Zimmerit en la forma característica que se aplicaba al PzKpfw V.



PzKpfw V Panther Ausf. A/G, 3ª División Panzer SS Totenkopf; Kovel, Polonia, abril de 1944.
Este carro parece ser una mezcla obtenida casando un casco de Ausf. A con una torre de Ausf. G; este tipo de arreglo no era insólito, ya que los vehiculo enviados a retaguardia para grandes reparaciones eran a menudo potenciados al ultimo nivel. El suave moteado mimético es convencional en colores y aplicación; de nuevo, nótese la disposición del zimmerit. El número blanco de la torre parece identificar al 1er carro, 1ra sección (zug), 1er compañía. Menos común es la presencia de un emblema divisionario; estos raramente se veían en un Panther; pero las fotos muestran la calavera de la Totenkopf claramente marcada en la derecha del glacis, como en la ilustración. Otra foto de la misma secuencia muestra un Panther desde atrás; el contenedor para pertrechos de la parte posterior izquierda del casco lleva la cruz nacional en posición central, y la calavera, debajo a la izquierda.




PzKpfw V Panther Ausf. G, 5ª División Panzer SS Wiking; Kovel, Polonia, abril de 1944.
Una bien conocida secuencia de fotos indica que por esta época, en el batallón de Panther de la División Wiking, la aplicación del mimetizado verde y marrón sobre el acabado amarillo de fábrica seguía diferentes esquemas según la compañía. Este carro de la 4ta Cía. lleva manchas de bordes marcados, especialmente acusadas en las planchas de los faldones. Los distintivos son los convencionales.




Carro de mando PzKpfw V Panther Ausf. A, 1ª División Panzer SS Leibstandarte Adolf Hitler; Normandía, verano de 1944.
Este carro ha sido identificado de diversas formas; un atento estudio de las fotos, si embargo, proporciona una identificación divisionaria clara: la divisa LSSAH esta profundamente marcada en el zimmerit del costado y cuarto trasero de la torre. El R02 en rojo y blanco de la parte posterior de la torre y faldones, mas frecuente en una etapa anterior de la guerra, identifica el carro de mando del subcomandante del regimiento, en la plana mayor regimental. La interesante insignia de la torre ha sido interpretada también de distintas maneras; los colores son necesariamente especulativos, pero la comparación de tonos en las fotografías originales según Osprey eran amarillo y negro. El significado de la pantera y del rayo estilo SS es evidente; el circulo puede representar una mira de cañón o una rueda de carro. El mimetizado es convencional.



PzKpfw V Panther Ausf. G, probablemente 11/9 Regimiento Panzer SS Hohenstaufen; Francia, verano de 1944.

Ejemplo típico de uno de los supervivientes del desastre de Falaise, durante la retirada a través de Francia. Hay una gran cantidad de pertrechos externos; el mimetizado con hojas era una precaución normal bajo un cielo dominado por los cazabombarderos aliados, lo mismo que un centinela antiaéreo de guardia a todas horas. Sobre el amarillo de fábrica están pintadas bandas verdes y marrones de bordes bastante marcados. El distintivo de la torre no esta claro: aparte del 6, otros números pueden estar pintados en la cara posterior de la misma, ocultos por la escotilla. Se desconoce el significado del disco blanco de esta última. Obsérvese las ruedas de rodadura de respeto y los armazones de hierro para los depósitos de combustible en la cara interna de los contenedores de almacenaje traseros.



Carro de mando PzKpfw V Panther Ausf. G, unidad desconocida; Francia, finales de 1944.

Un ejemplo, obtenido a partir de fotografías, del llamado mimetizado de emboscada aplicado a un Panther, en este caso un vehiculo de plana mayor regimental. El efecto moteado, que imita la luz del sol entre el follaje, esta hábilmente conseguido; al parecer, este esquema era muy común sobre todo en Königstiger y entre varios Panzerjäger.



PzKpfw V Panther Ausf. G, 4º Bón. Acorazado Coldstream Guards, 6ª Brigada de Carros de Guardias; Países Bajos, invierno de 1944-45.

Este Panther capturado a los alemanes fue fotografiado en diversas ocasiones, especialmente en acción junto con Churchill del Esc. A de este batallón en el área de Maastricht, en enero de 1945. Cuckoo esta pintado en amarillo en la base de cada lado de la torre, así como una destacada estrella de identificación aliada cubriendo casi toda la altura de la torre. El color amarillo de fábrica esta encalado por encima. También hay fotos en que esta sin encalar, con un 153 pintado a mano en el compartimiento para pertrechos posterior derecho.



Cazacarros M10, 150ª Brigada Panzer; Ardenas, diciembre de 1944.

Para identificar a los falsos vehículos del ejército de EEUU utilizados por la unidad de Otto Skorzeny se utilizo un complicado sistema, que incluía las inscripciones XX o XY en el glasis, entre los códigos de la Cía. B, 10º Bón. de Carros, 5ª División Acorazada. Se suponía que los vehículos debían viajar con la torre girada a la izquierda; además de un absurdo y complejo sistema de señales con los faros, gestos e incluso pañuelos de colores y partes sin abotonar de la chaqueta, que delataban una triste ignorancia de las condiciones de combate invernales. La treta no engaño a nadie durante mucho tiempo; los Panther/M10 B-4, B-5, B-7 y B-10 no sobrevivieron mucho tras entrar en combate en las afueras de Malmedy.



Fuente: Osprey Carros de Combate "El Panther"

Saludos

martes, 10 de marzo de 2009

Achtung Panzer



Autor: Guderian, Heinz
ISBN: 978-84-92567-02-7

Uno de los libros más esperados por los amantes de la Historia Militar
Mientras la mayoría de los teóricos militares del período de entreguerras permanecían anclados en los principios de la defensa estática, cuya plasmación más destacada sería la tan costosa como inútil Línea Maginot, Guderian planteaba una apuesta decidida por la movilidad. Según él, los blindados lanzados a toda velocidad, con el apoyo de la aviación, podían conseguir la rotura del frente y desarbolar al enemigo; había nacido la Blitzkrieg, la guerra relámpago.
Las teorías de Guderian, expuestas en esta mítica obra escrita en 1936 y ahora publicada por primera vez en español, serían puestas en práctica con devastadora eficacia por la Wehrmacht entre 1939 y 1941, alcanzando unos incontestables éxitos militares que sorprenderían al mundo.

Patton & Rommel




Patton & Rommel

Autor: Showalter, Dennis E.
ISBN: 978-84-92567-00-3


A lo largo de la historia, algunos militares han conseguido traspasar el límite de los campos de batalla y convertirse en auténticas leyendas. No hay duda de que el alemán Erwin Rommel y el norteamericano George Patton forman parte de ese selecto grupo. Ambos generales, con sus dotes innatas para el liderazgo, inculcaron a sus hombres un exaltado orgullo por combatir a sus órdenes y lograron lo más difícil, que sus enemigos sintiesen por ellos, además de un atenazante temor, una indisimulada admiración.
Esta amena y documentada biografía paralela de ambos militares permite comparar sus trayectorias vitales, tan diferentes y a la vez tan similares.
Rommel y Patton tenían personalidades muy distintas, pero compartían una estrategia basada en la velocidad, la sorpresa y la audacia, con unos resultados que elevaron sus figuras a la categoría de mito, una condición que ha perdurardo hasta nuestro días.



Un espía portugués pudo haber cambiado el curso de la Segunda Guerra Mundial, según documentos desclasificados este martes en Londres que revelan que si no hubiese sido descubierto, el agente nazi habría hecho fracasar la operación de desembarco de los Aliados en el norte de África, en 1942.

El portugués Gastao de Freitas Ferraz era un simple operador de radio en el barco de pesca 'Gil Eannes', que estaba autorizado a navegar en el Atlántico debido a la neutralidad de Portugal durante la Segunda Guerra Mundial.

Pero desde el inicio de la guerra, los nazis pagaban a De Freitas para pasar información a los submarinos alemanes sobre los movimientos de los navíos estadounidenses en el océano Atlántico, indica el expediente desclasificado por los Archivos Nacionales británicos.

Según esos documentos, desde su barco, el portugués habría podido detectar los buques con tropas estadounidenses destinadas al desembarco en el norte de África, y habría pasado la información a los alemanes. Con esa información, los servicios de inteligencia alemana habrían seguramente descubierto las intenciones de los Aliados, que habían tratado de hacer creer a los nazis que un desembarco iba a producirse en las costas de Francia.

De Freitas representaba por ello una amenaza para el plan de los Aliados de lanzar un desembarco en el norte de África, lo que había que impedir a toda costa, según los archivos.

Ese plan, conocido bajo el nombre en clave 'Operation Torch', buscaba abrir un segundo frente de guerra de cara a los alemanes, que estaban concentrados en la Unión Soviética.

Moscú había presionado a Estados Unidos y a Gran Bretaña para abrir un segundo frente, que redujera la presión de las fuerzas nazis sobre las tropas rusas, según los documentos.

Gran Bretaña propuso abrir el segundo frente en África, lo que serviría para mejorar el control del Mediterráneo y para preparar una invasión en la Europa ocupada por los nazis.

El portugués en su barco habría podido hacer fracasar todo ese plan, ya que al interceptar los movimientos del contingente aliado habría hecho fracasar la ofensiva aliada en Marruecos y Argelia, territorio nominalmente en manos del gobierno francés de Vichy, que tenía unos 100.000 soldados en el norte de África.

Pero De Freitas fue arrestado a tiempo, por orden del MI5, el servicio de contraespionaje británico. Según los archivos, los mensajes en código que enviaba De Freitas llamaron la atención de los servicios de inteligencia británicos en los meses anteriores al lanzamiento de esa operación.

"No hay duda posible de que De Freitas es un agente alemán", escribió el director general del MI5, Sir David Petrie, en una nota al ministerio de Exteriores británico, con fecha del 24 octubre de 1942. Petrie juzgó que el riesgo de que el barco 'Gil Eannes' se percatara del convoy de buques estadounidenses era demasiado alto, por lo que ordenó interceptar en el mar a De Freitas, se lee en este apasionante expediente que mezcla elementos que parecen salidos de una novela de espionaje con hechos históricos.

Tras su detención, el portugués fue trasladado a Gibraltar y luego a Londres, donde fue interrogado por los servicios de contraespionaje y reconoció que era un espía nazi. Después de la guerra, De Freitas fue expulsado.

Y el éxito de la 'Operation Torch', lanzada en las playas africanas el 8 de noviembre de 1942, cuando 600 buques desembarcaron a 70.000 soldados aliados, fue decisiva para la victoria aliada sobre los nazis.

Yahoo Noticias
Fotografía: Desembarco del contingente aliado de la operación Torch en las playas africanas. (Wikipedia)

Publicado: http://www.lasegundaguerra.es/viewtopic.php?t=2012&f=49&sid=934ae54d3ca6f86340b56d99c2232b26

sábado, 7 de marzo de 2009

Los cien últimos días (John Toland)



Título: Los cien últimos días. El final de la Segunda Guerra Mundial en Europa
Autor: el historiador norteamericano John Willard Toland (1912-2004) es autor de varios libros de la Segunda Guerra Mundial de gran éxito. Su original utilización de recursos narrativos en la descripción de los hechos históricos ha hecho que sus obras hayan gozado siempre de una buena acogida entre el gran público.
ISBN 13: 978-84-936181-2-4
Sinopsis:
Los últimos cien días de la Segunda Guerra Mundial en el escenario europeo son la culminación del drama que se ha desarrollado a lo largo de toda la contienda. Enesos tres meses losAliados darán el golpe de gracia al Tercer Reich pero, antes de que éste se hunda definitivamente, Alemania tendrá que soportar una tragedia con escasos precedentes en la historia de la humanidad. Víctima de intensos bombardeos, del frío y la falta de alimento, de los excesos cometidos por las tropas rusas y del terror impuesto por los últimos guardianes del nazismo, la población germana acabará recibiendo la noticia de la derrota con indisimulado alivio.
En estas páginas, el historiador John Toland ofrece una extensa, documentada y apasionante reconstrucción de esos últimos y dramáticos días. Su lenguaje ameno y directo, más cercano al periodismo que al propio de los libros de historia, transporta al lector a los diferentes escenarios en los que se libra esa partida final, en un fascinante relato de interés creciente que logra captar toda su atención desde el primer momento.
Los últimos cien días, un clásico imprescindible del que se han vendido millones de ejemplares desde su aparición en 1965, está considerado hoy día como la obra más completa sobre el final de la Segunda Guerra Mundial en Europa.

Panzer Commander. Las memorias del coronel Hans Von Luck


Título: Panzer Commander. Las memorias del coronel Hans Von Luck
Autor: Hans Von Luck
El coronel Hans Von Luck (1911-1997) sirvió en la 7ª y la 21ª División Panzer, combatiendo en Polonia, Francia, Norte de África, Italia y Rusia. Recibió la Cruz Alemana en Oro y la Cruz de Caballero.
Después de estar prisionero en Rusia fue repratiado y partició en asociaciones de veteranos. El historiador norteamericano Stephen Ambrose le impulsó a que escribiese sus memorias. Su fallecimiento, el 1 de agosto de 1997, mereció un obituario del diario británico The Times.
ISBN 13: 978-84-93618-11-7
Sinopsis:
El coronel Hans von Luck participó en las principales campañas de la Segunda Guerra Mundial. Su unidad motorizada fue una de las primeras en cruzar la frontera polaca el 1 de septiembre de 1939. Desde ese día, y hasta su cautiverio en Rusia, estuvo presente en los principales escenarios en los que se libró la contienda. En la Batalla de Moscú, las campañas del Afrika Korps o el Desembarco de Normandía, Von Luck fue testigo de excepción del apogeo y el ocaso del Ejército alemán.
Los recuerdos personales de este militar germano, amigo personal del mariscal Rommel, quedan plasmados en estas páginas. Su vívido testimonio supone una crónica excepcional, por su agilidad y la emoción que logra transmitir al lector, de la marcha de la guerra en los distintos frentes. No es de extrañar, por tanto, que estas memorias, aparecidas en 1989, se conviertan de inmediato en un clásico ineludible de la bibliografía de la Segunda Guerra Mundial.

Victorias Frustradas



Este es un libro para especialistas. La materia no es otra que “Historia militar”, y por lo tanto no se espere de él ninguna concesión a un público lector más amplio. Dicho esto, que me parece importante, agrego que es, dentro siempre del contexto señalado, un libro clave. Ya tenía noticias de él, pero al no existir edición al alcance lo dejaba para mejor ocasión. Pues bien, el momento llegó gracias a la editorial “Inédita” y me sumergí en su lectura para comprobar de primera mano como eran de buenas las memorias del Mariscal de Campo Erich von Lewinski, más conocido por el nombre de Von Manstein (1887-1973).
Se debe a este famoso general el plan ofensivo que destrozó las defensas francesas en el frente occidental en 1940, la conquista de Crimea, la derrota de los ejércitos soviéticos que en la primavera de 1942 intentaron reconquistarla y la caída de Sebastopol, plaza fuerte cuya posesión no fue menor en intensidad y combates a los acaecidos pocos años después, e inmortalizados por el cine, a la conquista de la isla de Iwo Jima por las tropas norteamericanas.

En 1942, noviembre, cuando se produjo el cerco al VI Ejército en Stalingrado, Von Manstein fue el encomendado por Hitler para salvarlo. Como comandante en jefe del Grupo de Ejércitos del Don (más tarde llamado “del Sur”) lo intentó y llegó hasta 50 km. de las líneas que contenían la bolsa del ejército cercado. No obstante la ofensiva soviética se lo impidió y los combates que siguieron le permitieron salvar el ala sur del despliegue alemán. Campaña que terminó con la retoma de Jarkov, en marzo de 1943, por la que se le concedieron las Hojas de Roble para su Cruz de Caballero.

En el verano de 1943 participa comandando una de las alas en la operación Ciudadela, la última ofensiva del ejército alemán que produjo el mayor combate de tanques de toda la historia militar, en Kursk.

Dirigiendo el Grupo de Ejércitos del Sur, se enfrentó al avance continuado soviético, retrocediendo hasta la frontera polaca. En marzo de 1944 y debido a su disidencia con Hitler respecto a como llevar las operaciones defensivas en el frente del Este, se le retira del mando y se lo condecora con las Espadas de la Cruz de Caballero. Nótese que es un caso muy especial ya que por ese entonces Hitler eliminaba comandantes de un plumazo y los enviaba a casa en medio de fuertes recriminaciones. Sin embargo en el caso de Von Manstein se hizo una excepción tanto más notable cuanto que la divergencia con su Comandante en Jefe era total.

Para él la guerra terminó un año antes, y en enero de 1945 evacua a su familia de Prusia Oriental para no caer en manos rusas. Posteriormente, ya terminada la guerra, es detenido por los británicos y en 1949 es sentenciado en Nüremberg por crímenes de guerra a 18 años de prisión; pena reducida a 12 años y posteriormente es liberado luego de pasar cuatro años en cautiverio. La carrera militar de Von Manstein no termina sin embargo aquí ya que ocupó el cargo de Consejero Militar de la Bunderwehr reconstruyendo el ejército federal (muy diferente a su predecesor) y también escribió dos libros, éste que comento y “Vida de un soldado”. Muere a los 86 años, en Baviera, rodeado por su familia.

Manstein fue considerado por sus colegas como un genio militar, y su vinculación con el gobierno nazi fue correcta pero tampoco de las más cercanas. Digamos que se mantuvo en un punto equidistante entre el respeto a la autoridad y su implicación fuertemente nacionalista y prusiana en el conflicto bélico que lo tuvo como un protagonista del Alto mando alemán. No ahorra críticas a la conducción de la guerra por parte de Hitler, críticas que probablemente eran comunes en los altos estamentos de la oficialidad, pero siempre aclara que siempre le fue fiel, no implicándose en la conspiración contra Hitler ni en ninguna otra clase de resistencia al régimen. En realidad por sus palabras escritas se puede deducir que Von Manstein creyó en Hitler como conductor de Alemania y sólo reparó en sus fallos cuando tuvo que confrontar en diferentes agitadas reuniones sus opiniones con las del dictador.

Para Manstein Hitler reunía grandes condiciones: “… poderosa voluntad, nervios seguros, capaces de mantenerse hasta en las más agudas crisis, y una innegable perspicacia, además de apreciables facultades operativas y la de percatarse de las posibilidades reservadas a la técnica” (pág.382) pero por otro lado considera que a Hitler le faltaba “esa especial competencia militar que tiene su base en la experiencia y a la que nunca llegó a suplir enteramente su ‘intuición’” (pág.372)

Por lo tanto considera que Hitler fue un comandante excepcional, con importantes aciertos al principio de las operaciones que paradójicamente, lo llevaron a una estrategia equivocada cuando las circunstancias cambiaron radicalmente. Según Manstein Hitler adoptó un plan de aferrarse a las posiciones, típico de Stalin en la primera época de las grandes derrotas soviéticas, en vez de sacrificar objetivos secundarios en pro de alcanzar una gran movilidad de sus ejércitos y presentar batalla allí donde los rusos seguían siendo inferiores.

El libro está bien escrito, sin florituras, con lenguaje sobrio y claro. Resulta muy ilustrativo para el especialista y puede ser juzgado algo repetitivo para el lector ocasional. Manstein, tengo la sensación, escribe para colegas y para la historia y pretende dar su opinión sobre los hechos en que participó y fue responsable. No entra en cuestiones políticas generales, omite delicadamente las barbaridades que los ejércitos alemanes cometieron en territorio ocupado (más allá de unos breves comentarios que descalifican la política nazi en estas zonas invadidas), y destaca el valor, heroicidad y gran competencia de las tropas y oficialidad de su país. En este sentido no hay nada nuevo (¡qué esperar de quién comandó las operaciones de guerra!) y tampoco aporta nada de interés. En cambio, en el terreno propio de la conducción de las operaciones militares Manstein ha escrito un libro que será estudiado a menudo por los diversos ejércitos del mundo, ahora y en el futuro.

Erich Von Manstein escribió un clásico, y por ello merece la atención del especialista y del lector culto que prefiere ir a las fuentes, siempre que le sea posible hacerlo.

Ficha Bibliográfica:

Manstein(1955), Erich Von Manstein, "Victorias Frustradas", Inédita Editores, Barcelona, noviembre 2006, pp.781, Tit.Orig: Verlorene Siege, Athenaum-Verlag, Bonn, 1955


Fuente: http://librosylecturas.blogspot.com/2007/04/evmanstein-victorias-frustradas.html

Documental "Batalla de Kursk"





MP40




Nacionalidad: Alemania
Fabricante: Erfurter Werkzeug und Maschinenfabrik (Erma), Haenel y Steyr.
En producción: 1940-45
Calibre: 9mm Parabellum
Longitud del cañón: 251 mm
Estriado: 6 estrías, dextrógiro
Capacidad del cargador: 32 balas
Cadencia de fuego: 500 disparos por minuto
Velocidad inicial: 381 m/s.
Miras: Punto de mira fijo y cubierto y alza ajustable a 100 y 200 m.
Peso:
4,03 kg vacía
4,70 kg cargada
Longitud:
Culata extendida: 833 mm
Culata plegada: 630 mm
Alcance efectivo: 200 m



Luego de la llegada al poder de Hitler y del partido nacionalsocialista en 1934, una de sus principales políticas fue la de desarrollar un programa de rearme. En este contexto, se inició la investigación en torno a una nueva generación de armas. Se llevó a cabo una investigación sobre los tipos de subfusiles existentes en el mundo, incluyendo el Thompson estadounidense.
El 17 de julio de 1936 se inicia la Guerra Civil Española y Hitler, que simpatizaba con la causa nacionalista, envió en su ayuda a la Legión Cóndor. Su experiencia en esta guerra fue de vital importancia, ya que les dio la oportunidad de probar y estudiar una gran cantidad de armas en combate real, incluyendo los subfusiles. También los pioneros de la guerra mecanizada (Guderian, Manstein y Rommel) solicitaron el desarrollo de un subfusil para dotar a las unidades de granaderos tanquistas de la infantería mecanizada. Respondiendo a estos requerimientos, Heinrich Vollmer comenzó a desarrollar un arma de este tipo en que se plasmarían los conceptos establecidos. En 1938, el director de Erma, Berthold Giepel, fue solicitado en Berlín y se le pidió que acelerara el desarrollo del arma, que seria destinada a la infantería mecanizada y a los paracaidistas. Unos meses más tarde, el subfusil MP38 sería aprobado por el alto mando alemán. Este modelo, en comparación con otros subfusiles de la época, era mucho más fácil de fabricar y más económico debido a los materiales y métodos usados.
La guerra se iniciaría el 1 de septiembre de 1939 con la invasión de Polonia. La experiencia con estas armas indujo a realizar algunos cambios, que primero fueron presentados en una versión intermedia (MP38/40) y luego incorporados en la versión inicial del MP40. El MP40 era un rediseño del MP38, con el objetivo de facilitar su fabricación en masa y disminuir el costo: se redujeron las partes fabricadas en torno y fresadora y se cambiaron por piezas hechas en acero estampado. También se aumentó la seguridad de éste, ya que el MP38 carecía de un sistema de seguro. El nombre deriva de las iniciales de Maschinen pistole (pistola ametralladora) del año 1940, fecha de su introducción.
El MP40 fue llamado a menudo Schmeisser por los aliados, por el diseñador de armas Hugo Schmeisser. Aunque el nombre es evocador, Hugo Schmeisser no diseñó el MP40, pero colaboró con el MP41, el cual en esencia es un MP40 con una culata de madera. A finales de la guerra se habían construido aproximadamente 1.047.000 MP40, miles de los cuales fueron capturados por el Ejército Ruso. Esta arma permaneció en servicio entre las tripulaciones de tanques del ejército noruego hasta la década de los 80. También estuvo involucrado en el conflicto de Indochina en la década de los 50 y en Argelia.





En los MP40 producidos inicialmente, el brocal del cargador tenía los costados lisos, mientras que en la versión del contingente principal (MP40/I) llevaba estrías para fortalecerla. El MP40/II fue una versión experimental con cargador de 64 cartuchos, pensado en respuesta al subfusil soviético PPSh-41. Introducido a finales de 1943, fue, sin embargo, descontinuado debido al aumento del peso. Hay alguna variación en las fuentes modernas con respecto a los nombres de las distintas versiones.
Ya en esa época, el uso de una cantidad similar de partes fabricadas en chapa estampada era común en otras armas, por ejemplo, en el Sten, pero era una innovación la culata metálica plegable y el uso de plástico en vez de madera en la empuñadura y el guarda manos. Esta arma era muy confiable y de fabricación muy económica. Tenía un retroceso relativamente débil aun cuando se disparaba en ráfaga, debido a su baja cadencia de fuego. Esto permitía que el MP40 fuera más preciso que otros subfusiles de la época, como, por ejemplo, el Thompson. Sin embargo, el muelle del cargador hacía que la munición saliera bastante rápido de éste, causando así atascos cuando se llenaba con las 32 balas que permitía; por esto, habitualmente sólo introducían 30 balas como máximo. En el MP40/II, un doble cargador fue experimentado con capacidad para 64 proyectiles; los cargadores estaban uno al lado del otro y al acabarse la munición del primero, se deslizaban horizontalmente para hacer uso del siguiente.
El MP40 tenía una longitud total de 833 mm, y con la culata plegada se acortaba hasta los 630 mm. El extraño espolón cerca del final del cañón fue diseñado para permitir a los soldados fijar el MP40 en las “troneras” de los APC, como el Sdkfz 251.



Extraído:
Wikipedia
arteHistoria
http://wilk.wpk.p.lodz.pl/~whatfor/mp40schem_full.htm

Cortesia: Jadair Suriano

Saludos

Flak 88





Usado tanto para la defensa antiaérea como cañón antitanque, fue gracias a este segundo papel que consiguió su fama, a causa de su letal efectividad, ya que podía penetrar el blindaje de cualquier carro aliado a grandes distancias. Era más conocido entre las tropas alemanas como acht-acht (ocho-ocho).
Tiene sus orígenes en la remota guerra franco-alemana de 1870. Durante el cerco de París los franceses utilizaron globos aerostáticos y para derribarlos, los alemanes encargaron a la fábrica Krupp que diseñara un cañón. El resultado fue una pieza de 37 mm, bautizada como BAK que iba montada en cureña sobre una plataforma tirada por caballos. Fue usado al final de la Primera Guerra Mundial para proteger los centros industriales alemanes en el Ruhr y el Rin de las incursiones aéreas aliadas. Denominándolo Flak, o Fliegerabwehrkanone (significa "cañón de defensa aérea") de 88 mm desarrollado por Krupp y Erhadt su cadencia de fuego era apenas de 3 disparos por minuto.
Al finalizar la Primera Guerra Mundial se le impuso a Alemania una serie de restricciones armamentísticas mediante el Tratado de Versalles (1919), entre las que figuraba la prohibición de desarrollar o poseer armas antiaéreas. De esta manera, por el momento, el proyecto quedaba olvidado. Cuando los nazis llegaron al poder, Adolf Hitler denunció el Tratado de Versalles y comenzó el rearme. Krupp, que había evitado las restricciones trasladando a su personal a Suecia, presentó un prototipo el Flak 18 era similar a su predecesor de la Primera Guerra Mundial, comenzó a ser fabricado en serie en 1933. Tenía un calibre de 88/L56, pudiendo disparar obuses de alto explosivo de 10,4 kg, así como munición perforadora de blindaje de 9,2 kg. La velocidad inicial era de 820 m/s.
Poseía cuatro patas en forma de cruz (kreuzlafette), con el cañón situado sobre un pedestal, permitiéndole un giro de 360º y una elevación entre -3 y +85 grados, lo cual le capacitaba para atacar tanto blancos aéreos como terrestres. El cañón estaba compuesto de dos secciones, lo que permitía una sustitución rápida de una de las partes si se desgastaba, sin tener que cambiar todo el cañón.
El Flak 18 fue probado en la Guerra Civil Española con la Legión Cóndor ante la urgencia de los nacionalistas de hacerle frente a la aviación republicana, ahí también fue donde se descubrió su potencial como cañón antitanque. Como consecuencia de la experiencia en la Guerra Civil Española se llevaron a cabo algunas modificaciones que dieron origen al Flak 36. La plataforma fue mejorada para incrementar la estabilidad y facilitar la producción, el cañón pasó a estar compuesto de tres secciones, lo que permitía un ahorro a la industria alemana, pues sólo había que sustituir una de las secciones en lugar del cañón entero, el resto de características seguían siendo igual que el modelo 18.
Las mejoras también del modelo Flak 37 respecto al 36 fueron las siguientes: Se volvió al cañón de dos secciones, en lugar de tres. Se mejoró el sistema de puntería, de manera que recibía información enviada por un puesto central de la posición del avión a una computadora mecánica analógica para que calculara la posición óptima de disparo. Ésta se mostraba con un puntero en uno de los diales, y los operadores tenían que mover el cañón de manera que el segundo dial coincidiera con el puntero.



Durante la Segunda Guerra Mundial se continuó utilizando el Flak 37 que tenía un alcance vertical de 9750 metros y 14.800 metros en horizontal; el Flak 41 tenía un alcance de hasta los 14.930 metros de altura y 19.700 metros en tiro horizontal. La superioridad del Flak 88 mm residía en su construcción de precisión y el uso de dispositivos avanzados, como el mecanismo de disparo, el de transmisión de órdenes y una plataforma de carga muy ingeniosa, que facilitaba la operación con tubos de gran altura. La más importante característica del cañón, era la velocidad con que impulsaba el proyectil. En el caso del Flak 18, 36 y 37, esta velocidad alcanzaba los 840 m por segundo; el Flak 41 enviaba su proyectil a una velocidad de 1020 m por segundo; y el Flak 43, a 1200 m por segundo.
Las municiones eran del tipo cartucho, en versiones de alto explosivo, perforantes y de iluminación con carga de tungsteno. El proyectil, de 9 kg iba montado en un casquillo que contenía 2,55 kg de nitropenta, que al momento del disparo, lo expelía por la boca del cañón girando a 10 mil veces por minuto en torno a su eje longitudinal, con una velocidad de más de 1 km por segundo. Era también, gracias a ese cartucho, que se podía lograr una cadencia de fuego de 15 a 20 disparos por minuto.
El proyectil antiaéreo estallaba a una altura predeterminada. Los cañones antiaéreos en sus comienzos actuaban independientemente pero luego fueron montados en baterías de hasta 40 unidades llamadas Grossbatterien que disparaban patrones rectangulares. Las baterías ligeras fueron incrementadas de 4 a 8 cañones. Todas esas baterías eran dirigidas por un controlador de tiro o predictor, que podía dirigir hasta 18 cañones contra un sólo avión, por andanada. Normalmente, los cañones eran agrupados en unidades de 4 piezas, dirigidas por un controlador de tiro que utilizaba la iluminación mediante proyectores o la adquisición del blanco por medio de radar. Las baterías de proyectores se conformaban en grupos de tres con un buscador acústico que detectaba el sonido de los motores de los aviones. El rango de los detectores acústicos era de 6500 metros, pero en vista del tiempo que requerían para calcular la distancia y dirección, el resultado podía ser de hasta 1600 metros detrás de la posición real de los aviones. Las baterías de proyectores debían hacer los ajustes necesarios para compensar la diferencia.
Durante el día los controladores de tiro seguían los aviones con un telescopio, pero en la noche los localizadores acústicos dirigían los reflectores. En cualquier caso, la nubosidad era un serio impedimento para apuntar los cañones con eficiencia, a menos que se usara únicamente el radar, dispositivo que en aquellos tiempos tenía una precisión muy relativa.
El control de tiro se transmitía mediante cables eléctricos conectados a cada cañón. Los controles de altura y azimuth se recibían en un cuadrante circular pequeño y el apuntador del cañón tenía que repetir los datos que se mostraban en un indicador más grande y apuntaba el cañón haciendo que las lecturas de ambos indicadores fueran iguales. El control por radar seguía el mismo procedimiento.
La táctica original era que una vez que un avión era localizado, se disparaban salvas calculadas para explotar en un patrón esférico de 60 metros de diámetro, pero la explosión de un proyectil podía causar daño hasta a 180 metros de distancia. Lo más adecuado hubiera sido un detonador de proximidad, pero los alemanes trataron de desarrollarlo sin éxito hasta que llegó el final de la guerra.
Una tripulación bien entrenada podía poner el cañón en posición de disparo en menos de 1 minuto, y se dice que los expertos podían hacerlo en 20 segundos… muy importante para la buena operación de las baterías, era la alta preparación de los sirvientes de la pieza, hasta 6 según el tipo. Pero en los últimos años de la guerra, ante la demanda de personal de infantería, se emplearon como sirvientes de los 88 desde jóvenes de las juventudes hitlerianas y mujeres voluntarias para la defensa de las ciudades, hasta muchachos escolares y ancianos. En el Frente del Este también fueron usados como sirvientes voluntarios rusos.



Los cañones de 88mm salvan a Rommel











Extraído:
Wikipedia
http://www.hisinsa.com/spa/item/TAMIYA-35283.html
http://www.exordio.com/1939-1945/militaris/armamento/flak88GER.html

Cortesia: Jadair Suriano



Saludos

Matilda (Segunda Parte)


El AI2EI, el prototipo del Matilda, durante los ensayos. En la cubierta posterior se han instalado los instrumentos de medida, pero sin los aditamentos externos el carro parece muy escueto. Las machas en la parte inferior del casco muestran el funcionamiento de las vertederas para el lodo, pero comparece su disposición con las de un carro serie.


AI 2 Matilda

La primera propuesta de un carro de infantería agrandado data desde septiembre de 1936, aunque el acento en aquel tiempo se ponía más en conseguir mayor potencia y velocidad con una tripulación de tres hombre, que en una mejor protección o incluso potencia de fuego. Siguieron tres meses de discusiones sobre las prioridades del proyecto que tropezaban invariablemente con el problema de un motor adecuado, y la búsqueda de un contratista, hasta que lo primero se resolvió en la Especificación del Estado Mayor General A12, y lo ultimo en forma de la Vulcan Foundry de Newton le Willows, Cheshire.
En los presupuestos del ejército de 1937 se incluyo el encargo de dos carros AI2, por un valor de 30.000 libras esterlinas. Aunque en las primeras fases se propuso un armamento de dos ametralladoras coaxiales, esta idea se abandono pronto a favor de un cañón contracarro de dos libras y una ametralladora coaxial Vickers en una torre para los tres tripulantes. En vista del cometido propuesto para el carro, hubo algunos que habrían preferido que se instalara un cañón capaz de disparar proyectiles de alto explosivo (HE). Pero el argumento oficial era que aquellos carros estaban para proteger a la infantería de los carros enemigos, y que en aquel momento el de dos libras era el mejor contracarro del mundo.
El problema de encontrar un motor de la potencia apropiada se resolvió poniendo dos. La misma solución se había adoptado en el caso del carro medio A Whippet de 1917, y de nuevo la unidad motriz escogida fue la de un autobús londinense. Pero en este caso el motor elegido era diesel, un AEC de seis cilindros en línea, refrigerados por agua y que desarrollaba un máximo de 87hp a 2.000 rpm. Dos de estos motores se colocaron, uno junto a otro, en la mitad posterior del carro, actuando sobre un engranaje situado en una caja en el extremo anterior de los motores, que reunía su potencia en un solo eje de salida, el cual pasaba por debajo de ellos hacia una caja de cambios epicíclica Wilson con preselector, de seis marchas, que funcionaba con aire comprimido procedente de un compresor Reavell de dos fases. Los ejes de salida de la caja de cambios pasaban a través de embragues de conducción de leva Rackham a unos últimos engranajes reductores que conectaban con las ruedas tractoras traseras. Sobre la caja de cambios había instalados ventiladores de refrigeración, movidos independientemente por el cigüeñal de cada motor, mientras que los radiadores, que podían girarse hacia arriba para permitir el acceso, estaban directamente sobre los ventiladores. El empleo de dos motores no fue nunca un compromiso satisfactorio; doblaba de hecho el tiempo de mantenimiento y producía un desgaste desigual de los componentes de la transmisión, a menos que ambos motores estuviesen perfectamente equilibrados. El único punto a favor era que si fallaba un motor el carro podía moverse todavía con el otro, ya que el motor inútil se podía desembragar permanentemente desde el interior de la cámara de combate.
La suspensión adoptada para el AI2 se denominaba de tipo japonés. Era un sistema altamente interdependiente de palancas acodadas y ballestas de espiral, desarrollado por Vickers-Armstrongs para el carro medio C vendido a Japón en 1928. Había sido intensamente probado en un carro medio británico cedido a Vulcan Foundry durante la etapa de diseño, y resultaba muy eficiente si no se querían grandes velocidades. Las orugas por lo menos en los prototipos, eran del tipo estampado de una sola pieza con una profunda muesca en forma de H en cada zapata, como las desarrolladas para el carro medio Mark III. Los prototipos y algunos de los primeros carros de serie tenían rodillos de retorno, pero los vehículos posteriores empleaban raíles deslizantes, mucho más sencillos de fabricar.
A pesar de la indiferencia anterior, la protección blindada se convirtió en uno de los factores más importantes del diseño de AI2. En el frente del casco tenia unos impresionantes 78mm de espesor, e incluso la plancha mas delgada era de 20mm, mas del doble del carro medio Vickers. De hecho, el carro podía resistir el impacto de cualquier cañón contracarro y de la mayor parte de las piezas de artillería de la época. Estructuralmente era una mezcla de planchas laminadas y de fundición, con una fuerza de integración más que suficiente para obviar la necesidad de un armazón. Pero dado que se consideraba que el casco sufría un esfuerzo considerable a toda velocidad a través del campo, las planchas superiores e inferiores del mismo estaban rebajadas en los lados para reducir la tensión sobre los pernos de sujeción.
Uno de los elementos más interesantes era el morro, que albergaba la cámara de conducción. Al igual que el AII, no estaba prevista una ametralladora en el frente del casco ni un tirador. Siguiendo las instrucciones del director adjunto de mecanización, esta sección se modelo como la del carro de crucero Christie, de importación, y luego fue probada por la MEE, rellenándose los huecos entre el morro y los armazones de las orugas con cajas de respeto triangulares y con tapa de persiana. La forma compleja de esta pieza frontal fue el cuello de botella principal en la producción del Matilda. Aunque la fundición era de un espesor apropiado donde hacia falta, también era demasiado gruesa en áreas donde no era necesario, imponiendo una clara penalización en el peso. Se hizo preciso rebajar una buena parte de este exceso de blindaje desde dentro, tarea laboriosa que solo podían llevarla a cabo con gran cuidado artesanos de probada destreza. La suspensión, en acusado contraste con la del AII, estaba totalmente cubierta, no solo en su parte superior, sino que también estaba provista de profundos faldones laterales con tolvas para el lodo y complejos paneles de inspección con bisagras.
La torre era de fundición, con los paneles superiores empernados por separado, una cúpula del jefe de carro en forma de tambor a la izquierda y una pequeña escotilla del cargador a su lado. El cargador era también el operador de radio del equipo no. 11, alojado (originalmente) detrás de la torre. El tirador estaba instalado delante del jefe de carro, como servidor del cañón de dos libras de tiro rápido (QF) y de la ametralladora coaxial refrigerada por agua Vickers de 7,7mm. En el exterior de la torre había instalados un par de lanzafumígenos de 100mm. Dado que la torre era bastante mas pesada que cualquiera anterior, estaba provista de un sistema de giro hidráulico, pero como disparar en movimiento era ahora el método aceptado en Gran Bretaña para la guerra de carros, el cañón se elevaba o deprimía por la acción del hombro del tirador. Esto significaba que el arma tenia que estar bien equilibrada, lo cual exigía a su vez que buena parte del extremo de la recamara, por detrás de los muñones, estuviese dentro de la torre.



Línea de producción del Matilda. Desde este ángulo resulta evidente el diámetro de la torre, lamentablemente pequeño. Los carros sin torre aun no tienen puestas las tapas de persianas en las cajas de herramientas del casco, a ambos lados del morro. Como mínimo son visibles dos patrones de orugas distintos.


“1940, el fracaso en Francia”



La dotación de combate de un batallón de carros era, en 1940, de sus 50 carros de infantería, con tres compañías de 16 carros cada una y dos carros para la plana mayor del batallón. Incluía así mismo siete carros ligeros de enlace y ocho vehículos con orugas para transporte del personal de relevo. Por esa época se esperaba que todos estos batallones tendrían AI2 Matilda (o posiblemente Valentine), pues la dotación también establecía una fuerza de 50 cañones de dos libras. Pero la realidad no permitió cumplir estas previsiones. Los dos batallones que fueron a Francia con la BEF (Fuerza Expedicionaria Británica) en 1940, cuando atacaron los alemanes, solo contaban con 100 carros de infantería de los que 23 eran AI2 Matilda, todos ellos en el 7º Royal Tank Regiment (Regimiento Real de Carros). El resto, incluidos todos los carros del 4º RTR, eran AII. Estos se habían equivocado claramente de guerra.
Cuando empezó la lucha en el oeste, los alemanes no tuvieron la amabilidad de presentar las posiciones defensivas estáticas que los carros de infantería estaban diseñados para saltar. En su lugar, explotaron la movilidad en un frente amplio y los Matilda se consumieron tratando de detener la hemorragia. Cuando consiguieron contactar con los alemanes en Arras, el 21 de mayo, se mostraron invulnerables frente a los cañones contracarro alemanes. La mayor parte fueron puestos fuera de combate por fuego de artillería, ya que las orugas al descubierto del los AII resultaban vulnerables. En el apartado positivo, estos carros de infantería más pequeños eran ciertamente más fiables que sus hermanos mayores. Algunos AII, principalmente los carros de los jefes de pelotón, habían sido equipados con las ametralladoras pesadas Vickers de 12,7mm que podían resultar bastante engorrosas para el jefe de carro. Además, tenían ahora lanzafumígenos de 100mm en la torre y equipo de radio no. 11 situado en el mamparo del motor, debajo y detrás de la torre. Para poder sintonizarlo, el jefe de carro tenía que dejar su lugar en la torre y echarse casi completamente al suelo.
Aparte de algunos problemas de motor, los peores fallos de los AI2 Matilda en Francia se produjeron en las orugas. Cuando estas se llenaban de barro quedaban prácticamente lisas e incapaces de agarrarse a suelos blandos o a los adoquinados de las carreteras francesas. En algunos AI2 se produjeron dos modificaciones; una era consecuencia de las pruebas de los cruces de zanjas efectuadas en Tilford, cerca de Aldershot, en septiembre de 1939, en las que se comprobó que una zanja de 1,8m recién hecha en arena blanda era excesiva para un AI2. Siendo más pesado de atrás, su parte posterior tendía a caer en la zanja y entonces ya no podía salir. El personal de la MEE ideo para ello un patín de cola que se colocaba en la parte trasera del carro, entre las orugas. Tenia la forma de una caja de acero, plana por encima pero curvada en la base, que se extendía casi 90cm detrás del carro. Pruebas posteriores en Farnborough demostraron que funcionaba bien en una zanja de 1,8m pero no en una de 2,1m. Se hablo de hacer un patín aun mas largo, de 1m, pero no se conocen informes posteriores. La otra modificación se refería a la suspensión. Había algunos temores de que la altura libre sobre el suelo del AI2 fuese demasiado escasa, por lo que se altero el paso de la suspensión para bajar los bogies de las orugas 15cm. Esto hacia subir en la misma magnitud el carro, aunque dejaba los bogies al descubierto. También ejercía una tensión excesiva en las barras acodadas, que ahora trabajaban en un ángulo forzado y se rompían con mayor facilidad. Esta modificación, así como el patín de cola, se observo en algunos carros en Francia, pero raramente luego.
Todos los carros de infantería de la 1ª Brigada de Carros del ejército británico se quedaron en Francia cuando los aliados evacuaron el continente. En Gran Bretaña solo permaneció el tercer regimiento, el 8º RTR, que estaba equipado con AII Y AI2 en una proporción aproximada dos a uno. Durante algún tiempo este fue el único regimiento de carros completo en el sur de Inglaterra disponible para resistir a una invasión.


Para finalizar con este post:


AII, Carro de Infantería Mark I Derwent, 4° Batallón, Real Regimiento de Carros,
1ª Brigada de Carros del Ejercito, BEF; Francia 1940


Siguiendo las instrucciones del ministro de guerra este carro esta pintado en verde
caqui, con una pauta disruptiva verd e oscuro. Se adoptaron distintivos cuadrados
blancos de 30cm como identificación británica. La mancha de color amarillo verdoso,
delante del visor del conductor, es una pintura sensible al gas que cambia de tono en
presencia de gas venenoso.
El numero 4 en blanco sobre un cuadrado rojo era la identificación de la unidad,
mientras que la barra blanca horizontal de encima indica que la brigada estaba actuando
como tropas de un cuerpo de ejercito, en este caso el I. Puesto que el numero era el
mismo para ambos batallones, hay que distinguirlos por el nombre del vehiculo, cuya
inicial coincide con el de su orden en el alfabeto. El 4º Batallón, sin embargo, lleva
también el ojo chino heredado del 6° Batallón, Cuerpo de Carros, en 1919. Otros
distintivos de este carro son el numero del ministerio de guerra, T3448, y la placa de
matricula civil, HMH793, emitida, como la mayoría de los vehículos militares
británicos de preguerra, por el consejo del condado de Middlesex.
El Derwent procedía del primer lote de AII con struidos. Fue el carro elegido por los
alemanes para una evacuación completa, lo que dio por resultado su destrucción.


Carro de Infantería A12, Matilda Mark I, Gamecock, 7° Batallón, Real
Regimiento de Carros, 1ª Brigada de Carros del Ejercito, BEF; Francia 1940


Este carro exhibe también el esquema mimetización disruptiva verde caqui y verde
oscuro y los cuadrados de identificación blancos de la BEF, pero los Matilda del 7°
RTR parecen haber llevado raramente, o nunca, placas de identificación. Así, los otros
únicos distintivos son los números del ministerio de guerra y de matricula pintados, de
forma alfo inusual, detrás. Este carro fue fotografiado después de su captura y de esta
manera se sabe que es uno de los de suspensión modificada y accesorio de p atín de cola
para salvar zanjas.


Carro de Infantería Mark II, Matilda Mark III, Griffin, 4° Pelotón Independiente,
Escuadrón de Carros de Malta, Real Regimiento de Carros; 1942


El destacamento de carros de Malta adopto un curioso esquema de mimetización
dictado por las condiciones locales. Estando gran parte de la isla al descubierta y
desnuda, el elemento más común eran las cercas de piedra que limitaban las carreteras y
rodeaban los campos, por lo que los vehículos se pintaron para confundirse con ellas.
Carecían por completo de otros distintivos, excepto los nombres de los carros, que
parecen haber conservado de sus anteriores destinos. Así, el Griffin, y posiblemente su
tripulación, permanecía anteriormente al 7° RTR. Se sabe que como mínimo tres
Matildas sirvieron en Malta.
Diversos carros pasaron por las manos de los Pelotones Independientes, incluidos Mark
VI ligeros, carros de crucero A9, A13 y valentine.



Carro de Infantería Mark II, Matilda Mark II, Gulliver, 7° Real Regimiento de
Carros; Libia 1941


El Gulliver II ostenta uno de los esquemas de mimetización más interesantes y
discutibles jamás aplicados a carros británicos. Basado en ideas navales adoptadas
originalmente en la Primera Guerra Mundial, su propósito era falsear la silueta del
carro, en lugar de confundirla con el fondo, y engañar de este modo a lis tiradores
enemigos. Dos tonos de gris, sacados probablemente de los almacenes de la Royal
Navy, se aplican sobre la base de color arena. El diseño no tenia nada de aleatorio, sino
que estaba calculado matemáticamente y, como puede comprobarse entrecerrando los
ojos, tenia su capacidad notable para alterar la forma del carro. Este efecto se echo a
perder posteriormente, hasta cierto punto, por la aplicación de grandes paneles de
identificación blanco-rojo-blanco pintados en los costados del casco y la torre de
muchos carros.
Como en Francia, el 7° RTR parece haber sido reacio a emplear otros distintivos en sus
Matilda exceptuando el número obligatorio del ministerio de guerra y el nombre del
carro.

Fuentes:
http://www.militar.org.ua/militar/tanqu ... ndial.html
Osprey, Carros de Combate - Matilda.
http://es.wikipedia.org/wiki/Carro_de_I ... Da_Matilda





Saludos

jueves, 5 de marzo de 2009

Matilda (Primera Parte)


Tanque británico A12 Matilda Mk.II en África del Norte

Especificaciones:

Matilda MK I/MK II Tanque de infantería
Nacionalidad: Gran Bretaña
Fecha: 1936
Dotación: 4 tripulantes
Dimensiones: 5,613 m. largo; 2,59 m. ancho; 2,51 m. alto
Peso: 26.926 kg.
Autonomía: 120 km. (MK I); 257 km. (MK II)
Motor: Dos Leyland, gasolina, 6 cilindros, 95 CV por motor o dos AEC, diesel, 87 CV por motor
Blindaje: 65 mm (MK I); 78 mm. (MK II)
Velocidad: 24 km/h. máxima en carretera; 12,9 km/h. campo a través; 0,914 m. vadeo; 0,609 m. paso de obstáculos verticales; 2,133 m. paso de trincheras
Armamento: Un cañón de dos libras y una ametralladora Besa calibre 7,92 mm.

En 1939 el Ejército británico estaba en mitad de una profunda reorganización, dando forma a su nuevo cuerpo acorazado, el RAC. Ya en los años 20 los regimientos de caballería habían desmontado despidiéndose para siempre de sus caballos, y ahora, ante el inminente peligro de guerra en Europa, el gobierno tomaba medidas urgentes para que sus soldados tuvieran un adecuado apoyo blindado en el conflicto que iba a venir. El carro de combate había nacido en Inglaterra, y sus primeros usos exitosos vinieron de la mano de tácticos ingleses, que dieron forma a un nuevo modo de hacer la guerra. Las cadenas habían nacido con la intención de acabar con la inacabable guerra de trincheras, devolviendo a la movilidad su lugar en el campo de batalla; era lógico que el carro de combate, el arma industrial por excelencia, naciera en la nación más industrializada de Europa.

Y sin embargo los soldados ingleses fueron enviados a luchar entre 1939 y 1942 a bordo de máquinas que eran inferiores tanto en su técnica como en su uso doctrinal a sus homólogas alemanas. Miles de soldados británicos murieron o fueron gravemente heridos porque, en palabras de un general inglés, "fueron enviados a luchar en ponis contra un enemigo que usaba caballos de verdad"


El lastre del pasado: la doctrina

El primer responsable de los errores militares ingleses es sin duda el Estado Mayor del ejército británico. Se dice (acertadamente, al menos en este caso) que el EM inglés siempre está preparado para ganar la última guerra que luchó. Desde luego ese fue el caso, porque la doctrina de uso de los medios acorazados ingleses era sin más una extrapolación de las doctrinas usadas en la I Guerra Mundial, basadas en la idea de un conflicto estático, una nueva guerra de posiciones, olvidando que precisamente la aparición del carro de combate había marcado el fin de ese tipo de guerra. Puesto que los mandos ingleses habían vencido en la I guerra mundial ¿Para qué cambiar nada? Estaba claro que había que seguir los viejos caminos una vez más, y así se hizo.


Sin más, comencemos con el carro de infantería Matilda…





AI I Matilda

En octubre de 1935, Sir John Carden, jefe de proyectos de carros de Vickers-Armstrongs Ltd., asistió a una reunión en el ministerio de guerra con el coronel M.A. Studd, director adjunto de mecanización. Sir John salio con un borrador de propuesta con el nombre en clave de Matilda para un pequeño carro de dos tripulantes, armado con una sola ametralladora. Studd puso dos construcciones significativas: el diseño tenía que estar listo en seis meses y, sobre todo, el nuevo carro debía ser barato. Se le asignaria la especificación A11 del estado mayor general.

Dado que el proyecto difícilmente podía calificarse de técnicamente comprometido, el prototipo, designado como A11E1 (WD Departamento de Guerra No T1724), estuvo listo para ser probado por la Dirección Experimental de Mecanización (MEE) en septiembre de 1936. No era una maquina impresionante; el casco, bajo y estrecho, estaba coronado por una minúscula torre de acero de fundición con una sola ametralladora Vickers. La cabeza y hombros del feje de carro casi llenaban el espacio de la torre, el conductor estaba situado delante suyo en una cámara igualmente estrecha con una escotilla sobre su cabeza que, abierta, bloqueaba de hecho la torre y obstruía el cañón. El motor un Ford V8 de 70hp, estaba situado detrás de la torre, bajo una cubierta posterior en pendiente, y estaba conectado a una caja de cambios Fordson de cuatro marchas y a una dirección del tipo de carro ligero, de embrague y freno Vickers, que movía las ruedas tractoras traseras. La suspensión, derivada del tractor de artillería medio Dragon Mark IV, constituía en dos elementos por lado, cada uno de los cuales comprendía cuatro pares de rodillos que actuaban sobre ballestas de un cuarto de eclipse desde un soporte central que incluía un rodillo de retorno. El carro presentaba también ruedas tensoras dentadas y orugas de acero de manganeso de paso medio. Tanto estas como las unidades de suspensión estaban totalmente al descubierto. Aunque el prototipo estaba construido en acero dulce, tenía unos respetables 60mm de espesor en el frente y, de hecho, confiaba en la rigidez de su gruesa plancha para la integridad estructural, puesto que no había ningún armazón interno de soporte del blindaje. El carro pesaba cerca de 11 toneladas, mas o menos lo mismo que el Vickers medio; no obstante, la MEE se refería siempre como carro pesado de infantería, y su velocidad máxima era de unos 13km/h, lo cual consideraba suficiente para seguir el paso de la infantería.

Las primeras pruebas revelaron la coleccin habitual de defectos, el peor de los cuales era el fallo constante de los pernos de las orugas. Esto se solvento en abril de 1937, cuando se bajo la unidad de suspensión trasera de cada lado, lo cual permitió elevar la altura de la rueda tractora a 13cm. De manera similar, debido a su gran desgaste, los dos conjuntos traseros de ruedas de rodadura de cada lado, provistas de llantas de caucho, fueron sustituidas por otras de acero. También hubo quejas sobre la visibilidad del conductor y la escotilla de la torre, pero estos aspectos se dejaron para mejorarlos en los vehículos de serie, aunque en realidad poco se hizo hasta la aparición del segundo lote.

La diferencia más significativa entre el prototipo y los vehículos de serie se refería a la torre, que perdió su labio prominente y ahora poseía una escotilla en dos secciones. Estos carros tenían ruedas tensoras sin dientes y rodillos de retorno no unidos directamente a los soportes de la suspensión, mientras que las orugas estaban más separadas del casco que en el prototipo. Los del primer lote tenían faros en lo alto del casco, justo delante de la torre. Los 79 restantes los tenían mas abajo, cerca de la parte frontal, debido a las modificaciones exigidas por el arado antiminas. La mayoría de A 11 tenía también dos cajas de respetos, dispuestas como alforjas, a ambos lados del frente.

Aunque no cabe duda de que estos pequeños carros estaban diseñados para ser empleados en gran número contra objetivos concretos, ya que en la práctica eran poco más que ametralladoras de infantería mecanizadas, nunca fueron encargados en gran cantidad. Se firmo un contrato de 60 unidades con Vickers-Armstrongs a finales de abril de 1938, repitiéndose el pedido por el mismo numero solo diez días después, mas o menos los suficientes para equipar dos batallones. Esto fue asi no por restricciones económicas, sino debido a un cambio de política, y el último pedido a Vickers de carros de infantería Mark I, formalizado en enero de 1939, fue solo de 19 vehículos. Ante la inevitabilidad de la guerra, se había decidido después de todo fabricar un carro de infantería armado con un cañón, y formar hasta seis batallones de carros. El nuevo carro se denominaría Matilda Senior…


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El A11E1, prototipo del carro de infantería Mark I. En la suspensión, se observa que los soportes de los rodillos de retorno forman parte del mismo montaje que las unidades de suspensión principales, así como la suspensión baja de la rueda tractora y la rueda tensora dentada delantera. También puede verse la plancha frontal del casco y los fuertes paneles que sostienen las ruedas tensoras. La escotilla abierta muestra como obstruye el cañón. Carece asimismo de soporte para el periscopio.

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El HMH788 (T3433) fue el primer AI I de serie. Esta vista frontal muestra la nueva disposición del casco y el típico mecanismo Vickers de ajuste de las orugas. Otros rasgos destacables son la estrecha hendidura de visión del conductor y el periscopio en su escotilla. En la torre se pueden ver dos soportes para los disparadores de fumígenos, así como la ausencia del borde prominente del prototipo.

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Otra vista del T3433 con las tapas del motor levantadas. El motor Ford ocupa casi todo el espacio disponible, pero delante del mismo pueden verse el radiador y el ventilador que lo separan del compartimiento de la tripulación. El cierre de la izquierda y el cable que conduce hasta el mismo muestran como se cierran las tapas, que solo pueden soltarse desde el interior del carro.

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Este diagrama oficial muestra el espesor del blindaje del Matilda en todas sus superficies, junto con el valor de la prueba Izod de la plancha.

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La suspensión adoptada para el Matilda consistía en dos bogues y uno simple, con ballestas horizontales, y polea tensora, de mayor tamaño y con ballesta vertical, en la parte anterior. Este diagrama procede de uno de los primeros manuales, muestra los seis rodillos de retorno (identificados como ruedas portadoras de la oruga) que fueron posteriormente sustituidos por raíles deslizables.



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